Poder, corrupción y responsabilidad ciudadana


Le pregunta Eva Larrauri a Jorge Ducay, autor de “El Candidato”, un thriller político ambientado en la transición hacia la democracia de Santamora, un país imaginario de Latinoamérica: ¿es inevitable que el poder arrastre corrupción?

No, pero es muy posible que la corrupción siempre busque poder. Y en sistemas con instituciones débiles, como Santamora en la novela, es fácil que los corruptos lleguen al poder. Sólo las instituciones fuertes y la militancia política de casi todos evita que los corruptos lleguen al poder. La responsabilidad de los ciudadanos se da en dos niveles: una es la militancia política; la segunda es el voto, consciente y responsable. Tienes que estar informado de a quién votas, porque luego viene la tercera cosa: controlar a quienes votaste para que hagan aquello que prometieron.