Los otros movimientos


Si algo puede salir mal, saldrá mal, o incluso peor. Esta especie de Ley de Murphy podría ser aplicada al entorno del PNV últimamente. Tiene algo de bueno, sin embargo: es difícil empeorar. Me llamó la atención ayer que Mariano Ferrer comentara que en lo de Arrasate todo fue normal, menos la actitud del PNV "¡cómo han podido cazarles en ésa!” decía. A ver cómo gestionamos ahora lo de los desalojos. Los de ANV, al unísono, fueron contundentes: “no condenaremos”. La respuesta está servida. Además los socialistas, que valoran el recule del PNV, piden más. No les basta con ese mea culpa jeltzale.

Exigen que se sumen ya -ahora mismo- a la moción de censura de Arrasate. Y pedirán más, y más. ¿A cambio de qué? ¿Qué gran oferta yace en el subsuelo que los mortales normales desconocemos? Los socialistas, insaciables, han exigido poltronas en la BBK si se quiere que la fusión prospere. Ya se les cedió (¿graciosamente?) la presidencia de la Vital sin asegurarnos la fusión, ahora reivindican su parte en la BBK y la Kutxa, y luego (….). Cambiando de tercio, aunque vaya Ud. a saber ¿Qué se traen entre manos los hermanos Bergareche y la BBK a cuenta de El Diario Vasco y El Correo?

Nos cuentan que los Bergareche, con el apoyo de Alejandro Alechu Echevarría, se harían con la propiedad y la gestión de El Diario Vasco y de El Correo, merced al apoyo financiero de la caja de ahorros vasca presidida por Xabier Irala. Y uno sabe que Irala es afiliado jeltzale, y sabe que el PNV controla la BBK, y sabe que en la presunta, posible (¿y probable?) fusión de Iberdrola con Gas Natural el paquete accionarial BBKaitarra pesa lo suyo. ¿Algo está cambiando? ¿Terminarán los Bergareche por mandar al paro articulero a Joseba Arregi, Zubizarreta, Unzalu, Aulestia y resto de conversos a la causa unionista y abrazarán la causa nacionalista, aunque sea la neoestatutista?

En este tempranero arranque de campaña -sea electoral, sea consultiva- la función de los medios es clave. Lo ha sido siempre, pero lo es más esta vez, ya que de una u otra manera podemos estar a las puertas de una evolución estructural en el panorama político y social de Euskal Herria. No me refiero a la tempestad económica que se avecina a nivel mundial, y que nos salpicará con mayor o menor ímpetu (¿a quién le tocará capearla?), sino a la posibilidad de que una tensa consulta nos lleve a un escenario diferente del vivido, o la posibilidad de que un cambio de color en el gobierno lleve al sillón de Ajuria Enea a un unionista, a Patxi López. Son muchos los que lo desean, incluso abertzales. Y no les importará votar unionista, con tal de que haya cambio, como muy claramente lo dice Joseba Barandiaran en Argia: "Sozialisten nagusitasun hori euskal erakundeetan islatzea, ez da Innobasquek sustatuko deun berrikuntza mota baina, ziurrenik, lugorria bezain onuragarria litzateke Euskal Erdirako, EAJ bera ez den begietara". Benetan uste hori hedatuta dagoela oso.

Con ese panorama por delante la función mediática será determinante. Por eso que yo, que deposito mis escasos ahorros en la BBK, quiera saber cómo va a gestionar políticamente Irala el posible apoyo financiero de la entidad que preside a los hermanos Bergareche, quienes hasta el presente nunca han demostrado excesivo cariño a los abertzales, y como muestra el editorial de hoy de El CorreoTarde y mal”, y en su contenido: “Los socialistas, que son quienes la han solicitado, tendrán que valorar si esta apariencia de rectificación en materia tan delicada como la política antiterrorista les vale o no como garantía suficiente para forjar acuerdos de estabilidad con los nacionalistas vascos”.

Poco han tardado los socialistas en cumplir órdenes, menos de lo que tardaron los jeltzales en “rectificar” lo de Arrasate. Ahí se ve que en la cúspide de mando están los diarios vasco-unionistas de Vocento. Por eso, y por más razones, que yo exija explicaciones de qué van a financiar mis euros.