Montenegro: nueva realidad en Europa


Solana es más consciente que nadie de que Montenegro crea precedente. Él y el coro de españoles de todo género (políticos, profesores, profesionales liberales,..) que estos días han continuado con el sonsonete anti-abertzale al que dieron inicio hace ya muchos años saben que el referéndum de Montenegro, con resultado de independencia, no es aislable dentro de Europa. Un catedrático de Pensamiento Político de la Complutense, vasco, arengador habitual en Vocento y Prisa, Antonio Elorza, con gran dolor supongo, ha epilogado su artículo "Llaves del proceso" de ayer en El Correo, de la siguiente manera:

"Y una vez citado Montenegro, conviene admitir que los nacionalistas vascos tienen plena razón al subrayar la importancia del referéndum del pasado domingo. Hasta ahora, la versión oficial consistía en que el derecho de autodeterminación se restringía a las situaciones de dependencia colonial.

Pero es la UE, con la aquiescencia de este curioso ministro que es Moratinos, ignorante tal vez de lo que significa el precedente, la que se convierte en tutor y notario de un ejercicio en sentido separatista de la autodeterminación, fijando incluso los porcentajes de voto. ¿Por qué respecto de Serbia sí y de España no? Zapatero habla de capacidad de decisión de los vascos dentro de la legalidad. Ahora bien, si hemos contribuido a crear una nueva legalidad en Europa, ¿por qué no aplicarla cuando la mayoría de los vascos respalda el ejercicio de la autodeterminación? Una última pregunta: ¿no sería mejor pensar antes de hablar, olvidándose del márketing político? Propongámonos encauzar al nacionalismo radical, pro-ETA o del PNV, hacia la democracia, no jugar con un doble lenguaje que lleve a un callejón sin salida por contentar a todos y ganar las próximas elecciones".