Y ETA, ¿qué ha dicho?

En el proceso de paz Zapatero dará por verificado algo más que evidente a los ojos de todo el mundo: ETA cumple el alto el fuego. Lo que ya no podrán garantizar Zapatero e Imaz a la ciudadanía es que el alto el fuego sea definitivo, porque sobre el papel no lo es. Para demostrarlo recuperaré un par de párrafos de I. Iriondo en Gara: “Cualquiera sabe que, aquí y en Auckland, un alto el fuego es una medida provisional que, en función del desarrollo de los acontecimientos y del cumplimiento de los acuerdos pactados, puede devenir en el fin definitivo de las hostilidades o, de lo contrario, en la vuelta a las mismas.” Lo cual viene a significar que mientras no haya cumplimiento de los citados acuerdos, de contenido político, ETA tutelará el proceso de normalización. Eso es lo que hay.

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Cuando el periodista de Gara plantea a los etarras de qué hablará con los Estados francés y español, esta responde: “El principal eje del a negociación se centrará en garantizar que los estados levantan las restricciones que hoy imponen a Euskal Herria. (…) deberán ofrecer garantías de que ese proceso democrático se desarrolla sin injerencias y sin su intromisión. Sobre esas bases se abriría la situación para hablar y negociar sobre las consecuencias del conflicto.” Es decir, va bastante más allá de unas simples negociaciones por la cuestión de los presos y la entrega de armas.

De todo lo cual concluimos que ETA, como Egibar, como Ibarretxe y como Batasuna consideran que primero hay que desbloquear el proceso normalizador, par dar paso al proceso de paz. Es cuestión de prioridades. Justo lo contrario de lo que, Zapatero e Imaz, han establecido como condición necesaria para el inicio de conversaciones políticas. Si estamos pendientes del cese definitivo de la actividad armada la espera puede prolongarse in eternum, y si, como es deseo de Imaz, la paz ha de ser absoluta antes de emprender el proceso de normalización, es seguro que esto se pudre. ETA, en la práctica, no tiene ninguna posibilidad de volver a sus andadas, pero no es menos cierto que la sola probabilidad de que sea cierto es una baza de envergadura en sus manos que la utilizará con fines políticos, como lo está haciendo ya. Tampoco nos engañemos, ETA llena el vacío de Batasuna y suple sus deficiencias, dándole bombo mediático.