25-O: ¿entre Gernika y Gasteiz?

Yo más bien diría “entre Bilbao y Egibar”; entre el presidente de GBB que se declara independentista sin matices y el diputado general vizcaíno que se reafirma en sus reflexiones de abril y apuesta por un “encaje amable de Euskadi en España”. Yo no soy español señor Bilbao, yo soy exclusivamente vasco, y mi país abarca los territorios al sur del Adour (Francia) y al norte del Ebro (España). Solicitan de mí estos días que participe el sábado que viene en dar cierre -esperemos que eventual- a una apuesta (Ley de Consulta) que para mí no ha tenido el corolario que se merecía. Como afiliado hubiera cumplido. No con excesivas ganas. Quizá esté equivocado. Quizá sea el momento de tirar aún con más fuerza del carro, de no aparcarlo por negligencia ajena. Por eso acudiré, y lo haré con más gente, gente no afiliada (¿cuándo reflexionaremos sobre ellos?), con simpatizantes sin carnet ni derecho a cargo, pero que tienen menos dudas que muchos nosotros. Acudiré a cubrir los recovecos de la letra B del BAI; y si sobramos, saltaremos a la A; y a la I, si hace falta. BAI al derecho a decidir. BAI a la independencia si así lo decidimos. Y, ¿por qué no? BAI al encaje amable en España (¡y en Francia!), si así lo deciden los ciudadanos de Euskal Herria. Y con los mismos mimbres quiero acudir a las elecciones, a por algo más que una transferencia pendiente.