Mayo 2007: momento trascendente y decisivo

Lo ha dicho Zapatero. Un servidor empieza a estar algo harto de tanto momento en la cumbre por parte del Gobierno español y por parte del MLNV. No sé muy bien a qué puede estar refiriéndose el presidente español cuando nos convoca para dentro de un año. Se me antoja que la cita para setiembre de este mismo año es también relevante; y lo será, otra vez más, entre el Gobierno y un apéndice del MLNV, de ETA: el presidente informará sobre la marcha de las negociaciones Gobierno/ETA. Mientras tanto, el resto de partidos políticos se conforman con las migajas, salvo el PP, quien tiene tras de sí buena parte de España en su oposición frontal a la política que Rodríguez Zapatero lleva adelante en el proceso de paz.

En el terreno de las migajas se reunirán hoy en Bilbao López e Imaz. Reunión que será, una arriba abajo, la décima inter-partidaria, previa a la conformación de la mesa de normalización. Una oportunidad más para que los que en principio juegan el papel de convidados segundones confronten sus diferencias metodológicas y disfruten de ciertos minutos de pantalla a los postres de los encuentros.

No sé qué información trasladará Zapatero a Imaz sobre la marcha del proceso. Desde luego que momentos estelares, muy pocos. El presidente del EBB debe saber que aquí y ahora sí que nos jugamos un futuro en paz; pero debe saber que también está en juego el futuro jurídico y político de este país. Está en juego, en definitiva, el momento trascendente y decisivo de Euskal Herria. Me temo, en cambio, que no es a ese momento al que se refirió ayer Zapatero. Ni tampoco, desgraciadamente, a ese otro al que se refirió Mayor Oreja en la Cope, cuando afirmó que “las negociaciones sobre la legalización de Batasuna y la cesión de Navarra están muy avanzadas y la autodeterminación todavía está por formular, y éste sí que tiene que ser un trabajo alrededor de la mesa de partidos”.

Lo importante Imaz es que Zapatero y Otegi, Otegi y Zapatero se están repartiendo los tiempos del estrellato, los titulares de los periódicos, los momentos decisivos y trascendentes desde aquel ya lejano 22 de marzo de el Alto el Fuego. Del resto, algún privilegiado tendrá información de primera mano, pero con esa cocina, sin acudir de invitado de lujo a la celebración, no nos jamamos un rosco, ni en setiembre, ni en mayo que, por si a alguien se le ha olvidado, es mes de elecciones.

Por la paz, Josu Jon, hasta dos avemarías. De ahí en adelante uno hace el canelo, es decir, el primo.